En Nueva Jersey, manejar sin permiso constituye una grave ofensa de acuerdo con N.J.S.A. 39:3-10. Las penalizaciones pueden abarcar multas de hasta posibles condenas de prisión de hasta 60 días, y una restricción para conseguir una licencia a futuro. Si un individuo nunca ha tenido licencia, se encontrará con penalizaciones más rigurosas que una persona con una licencia vencida. Las reiteraciones pueden derivar en sanciones más severas y problemas legales adicionales.